Miles de pequeñas empresas en Honduras se fueron a la quiebra debido a la pandemia de la COVID-19 al no poder superar el cierre de la economía del país.
Las pequeñas empresas de Ojojona, ubicada a 34 kilómetros al sur de Tegucigalpa, la capital hondureña, son parte del 33 % que estuvieron obligadas a despedir o suspender sus empleados por el cierre de la economía del país a causa de la COVID-19, según estudios económicos hechos por la universidad estatal.
El Instituto de Investigaciones Económicas y Sociales de la principal universidad estatal confirma que se perdieron 500 mil empleos en especial en el sector turismo.
Las plazas que antes eran llenadas por turistas, actualmente están vacías a pesar de la reactivación económica. Municipios cercanos a Tegucigalpa han sido fuertemente afectados, en el único rubro que les generaba ingresos que es el turismo.