La Patagonia es una de las mayores reservas de agua dulce del planeta, así como de biodiversidad.
Los proyectos mineros implementados en esta zona amenazan ese patrimonio y la identidad cultural de la zona austral, que comparten Argentina y Chile.
Para facilitar esos proyectos, el Gobierno de Sebastián Piñera intenta reducir las dimensiones de los parques naturales que protegen el ecosistema patagónico.